Salir a tomar algo en Granada es un verdadero placer. En la mayoría de los bares (por no decir en todos) la bebida viene acompañada de una generosa tapa.
En algunos sitios, especialmente los más turísticos, las tapas son siempre las mismas y siguen un orden establecido. Así, verás que te sirven «la primera», «la segunda», «la tercera»… y que el nivel de las mismas va in crescendo.
En otros bares puedes elegir la tapa de entre lista de opciones a cada cuál más apetecible. ¡Ojo!, es habitual que cuando vas en grupo sólo puedas pedir dos tipos diferentes de tapas cada vez.
En mi última visita a Granada he descubierto unos cuantos bares de tapas muy recomendables que os reseño aquí. Por cierto, gracias a Maria Quesada, de Yelp e «hija política» de Granada (como yo) por sus recomendaciones.
Bar Aliatar. Calle San Sebastián 4.
Posiblemente uno de los sitios más auténticos de toda Granada. Está en una calle pequeña en la zona de detrás de la Catedral, en pleno centro. Es uno de esos sitios que lleva en Granada toda la vida y todavía hoy siguen sirviendo sus míticos bocadillos de «perrillo con tomate», que no es que sean de carne de perro, pero es una especie de perrito caliente a la española: con longanizas y tomate casero. ¡Recomendadísimos!

Los Diamantes. Calle Navas 28
Es uno de los muchos bares de tapas de la zona que rodea la calle Navas, la más céntrica y turística del tapeo en Granada. Personalmente, es la zona que menos me gusta, porque suele estar abarrotada de gente y hay muchos turistas. Generlamente, en los bares de esta zona no puedes elegir tapa. Lo normal es que, tras pedir tu bebida, escuches al camarero gritarle a la cocina «¡Una primera!!», y te pondrán la tapa que tienen asignada a la primera consumición. Como decía antes, la calidad de las tapas suele ir mejorando.
El bar Los Diamantes es uno de los más populares. La especialidad es el pescado frito rebozado. El local es estrecho y antiguo y para llegar a la barra y que te hagan un poco de caso tendrás que pelearte con el gentío que allí se acumula. Yo logré hacerme un hueco en la barra, pero no hubo manera de que me atendieran. Había tanta gente que había que echarle mucho morro para destacar entre tanto pedido. Confieso que la desesperación pudo conmigo y desistí, no aguanto las aglomeraciones.
Taberna Los Trastos. Calle Sarabia 13
También en la zona de la calle Navas pero en una calle más apartada. Tiene bastante éxito pero más que las tapas (más bien flojas) yo creo que es por la terraza que tiene en la calle, ya que está situado en una plaza pequeña peatonal donde pega el sol por las mañanas y a mediodía. Una delicia para los guiris del norte necesitados de vitamina D.
La Corrala del Carbón. Calle Escudo de Carmen nº11
Decoración rústica muy cuidada y una carta de tapas y raciones muy completa son algunos de los aspectos que primero llaman la atención de este sitio. Es más caro que los anteriores y tiene salón para comidas y cenas apartado de la zona de la barra, lo que mantiene un ambiente más privado. Tampoco puedes elegir tapa, pero las que ponen son bastante buenas. Aún así, aquí yo recomiendo pedir alguna ración, las hay deliciosas y originales. Recomendadas las berenjenas a la miel que podéis ver en la foto:

Taberna La Orza. Calle Torre de los Hidalgos 11
Si te alejas del centro encontrarás muchos bares de tapas mucho menos turísticos y más frecuentados por los granadinos. En las calles cercanas hay muchos bares de tapas. Es una zona con mucho ambiente y en casi todos los bares podrás elegir tapa. Uno de estos sitios es la Taberna La Orza. Aquí están muy buenas las croquetas caseras y el chorizo al infierno, que sirven en una cazuelita de barro y flameado, literalmente en llamas!
Masae. Callejón de Arenas, 2
Este sitio ha sido todo un descubrimiento. Un bar japonés donde puedes combinar tu bebida con una tapa japonesa, desde sushi hasta otras delicias orientales. ¡Es la combinación definitiva!
Bar Ávila. Calle Verónica de la Virgen, 16
Uno de los mejores bares de tapas de Granada. Está situado en una zona céntrica pero más apartada de las calles más turísticas. Si callejeas por los alrededores del Bar Ávila, encontrarás muchos otros bares de tapas muy recomendables. En el Ávila puedes elegir la tapa, que siempre está deliciosa y es muy generosa. La especialidad es el jamón asado, pero no te pierdas la puntilla ni el cazón, ¡riquísimos!
Rincón de San Cristóbal. Cerca del Callejón de Arenas
No recuerdo el nombre de la calle en la que se encuentra este bar, pero está muy cerca del Masae. El local tiene una decoración vinícola, con toneles de vino como mesas y una decente selección de vinos. Puedes elegir tapa y, en este caso, no pude resistirme al salmorejo, ¡me encanta!
Er Soniquete. Calle San Marcos, 8
Cerca de la Calle San Antonio se encuentra este discreto bar. No puedes elegir tapa, ¡pero la primera es un montadito de lomo que quita el sentío!
Rhin Barril. Esquina calle San Isidro y el Callejón de Arenas
Está en una plaza con donde ponene una terraza con bastante ambiente por las mañanas. Puedes elegir tapa.
Los Tintos. Calle San Isidro
Local más orientado a tomar vino. Ponen tapa, pero quizás no es tan espectacular como en otros sitios. Aún así, merece la pena.
Tetería Ábaco. Calle Álamo del Marqués, 5
Vale, este no es bar de tapas, pero en algún momento del día querrás hacer un descanso de la cerveza y el vino y tomarte algo más ligero. En Granada hay muchas teterías, las más famosas en el casco antiguo. No te dejes llevar por la tentación de entrar a la primera que encuentres. La tetería Ábaco está un poco escondida y no es muy conocida, pero te encantará su terraza con espectaculares vistas a la Alhambra. Precios más baratos que en la calle de las teterías y ambiente más relajado y menos turístico.